El Diario Hoy publicó una columna de MarketingActivo redactada por María Belén Tinajero el día 2 de junio del 2009.
El primer día de junio celebramos en algunas partes del planeta, el día de los niños y las niñas. A nadie sorprende que este grupo etario represente un target muy atractivo en el mundo comercial, en efecto encontramos productos dirigidos a ellos en muchos rubros: alimentos, bebidas, entretenimiento (parques y museos o videojuegos y juguetes). Podemos nombrar tantos productos que el espacio de este artículo no sería suficiente.
Ustedes dirán “somos los padres los que pagamos, no los niños” pero en realidad son ellos los decisores de la compra. Tal es así que las marcas luchan cada día con posicionar sus mensajes en la mente de los niños a través de todos los canales posibles. Por ejemplo, en las góndolas de los supermercados, la batalla para colocar producto en el sitio ideal a la mirada de los niños es dura.
Ahora, ustedes dirán “yo no quiero que mi hija sea sujeto de este juego comercial” y yo les pregunto, ¿han educado a sus hijos sobre estos asuntos? Como marketineros que somos, sabemos bien que el mundo de la libre compra funciona, también consideramos muchas veces que un consumidor más educado mejora el estilo de vida de la sociedad y con esto, hace que nosotros mejoremos la calidad de nuestros productos porque será más responsable es sus decisiones de compra.
Saben los niños lo que compran? Saben los padres de familia lo que compran? Nosotros sin duda, sabemos que los niños son un target que ingresa miles de millones de dólares al mercado y por supuesto, todos queremos un porcentaje de este pastel.
Con este artículo he deseado hacer consciencia en dos funciones: padres de familia y ejecutivos de las áreas responsables de productos, no dejemos de lado las normas de producción para que sigan la calidad necesaria, los creativos, los comunicadores y por supuesto, mis colegas marketineros. La responsabilidad de tener como target a los niños es alta por muchas razones implícitas en este artículo.